GIRIBAILE: Un enclave singular.
GIRIBAILE: Su Oppidum ibero, sus cuevas y pantano, hacen del lugar un entorno sin igual.
Es éste uno de los lugares que suelo frecuentar en las "escapadas" de los fines de semana; varias veces cada año disfruto visitando su entorno.Conocí este lugar hace unas décadas...tambien podría decir hace unos años...unos 21. Por circunstancias de la vida, el destino nos lleva a conocer ciertos lugares que tienen su calado en nuestras vivencias. Éste es uno de ellos, al menos para mí.
La última visita de este presente año(2018) la realizamos a finales del mes de abril. Tras las lluvias caidas en los últimos meses, el campo está digno de ver. Una muestra la obtenemos en la altiplanicie donde se encuentra el Oppidum o fortaleza ibera, dando vistas al pantano de Giribaile.
Se respira frescor: se nota que la naturaleza desprende vida. Por los aires ...nos acompaña un ave rapaz en busca de su sustento:
Tras la visita a las cuevas y ascender por una escalinata situada a la vera de las mismas, nos disponemos a entrar a la ciudadela por donde, al parecer, fuera en su día el acceso a la fortificación. Un corte en la muralla quiere delatar la presencia de la misma miles de años atrás.
En la siguiente fotografía vemos la muralla derrumbada a ambos lados del acceso:
Mirando hacia el norte, podemos ver el pantano de Guadalén y el pueblo de Vilches:
Las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en la zona aún mantienen la actividad. En la ladera Norte, dando vistas a Vilches y Sierra Morena, están evolucionando el descubrimiento de los cimientos de lo que parece una casa del período ibero tardío, más bien con apariencia de construcción romana. En la fotografía anterior podemos apreciar las lonas azules que cubren los mencionados cimientos.
Abandonamos la altiplanicie y descendemos hacia el lugar donde están teniendo lugar los últimos hallazgos. Sin duda, por su enclave, fuera de una pretensión meramente defensiva, nos lleva a pensar que el descubrimiento se acerca más bien al período de Alto Imperio Romano. No sólo lo delata su construcción, sino también su situación.
La tarde, seminublada, aireada y fresca, nos muestra lo mejor de su ocaso.
Paseando por los alrededores de su castillo, nos viene a la memoria la famosa leyenda que ha perdurado durante siglos en la tradición oral. Se cuenta que Don Gil, habiendo obtenido el título de Señor de Las Cuevas de Espeluca, y manifestando todo su orgullo por ser poseedor de la mayor parte de las tierras de alrededor, mandó tallar una frase en la entrada del castillo:
“De río a río todo es mío. Esta tierra es de Gil Bayle, que no morirá ni de sed ni de hambre”.
Se cuenta, que estando de cacería, el señor Gil Bayle, montado a caballo, cayó a una cárcava sin que nadie se percatara. Pasados unos días, allí lo encontraron sin vida, habiendo muerto, paradójicamente, de sed y de hambre.
Sea real o no tal leyenda, nos invita a mirar hacia el horizonte y volver a recordar aquellas palabras.
Película del lugar realizada con el drone el 19 de agosto del 2017:
Disponemos de un patrimonio que quizás no sepamos valorar y explotar lo suficiente.
Juan José Mercado Gavilán.
Lahiguera a 23 de junio del 2018.
Otros enlaces donde ampliar la información sobre Giribaile:
http://lahiguerajaen.blogspot.com/2013/09/giribaile-paseo-fotografico.html
http://www.viajesalpasado.com/por-el-jaen-desconocido-ii-giribaile-la-pequena-pompeya-ibera/
http://castillosyfortalezasdejaen.com/castillos/19-castillo-de-giribaile.html
https://riunet.upv.es/bitstream/handle/10251/98142/4162-13871-1-SM.pdf?sequence=1&isAllowed=y
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